Aunque muchos no lo crean, los gatos pueden pasar por situaciones en las que desarrollan sentimientos de miedo y ansiedad. Puede haber muchos detonantes para estas situaciones, pero por lo general, los causas más comunes son el estrés y la tensión. Por suerte, nuestras mascotas ya no tienen que atravesar estos procesos solos, podemos ayudarles con un collar de feromonas para gatos.
Estos también son conocidos como collares calmantes y básicamente todo lo que hacen es liberar ciertas feromonas felinas (sustancias químicas en forma de aromas que libera el cuerpo de los gatos) que hacen que el animal se sienta más cómodo o incluso seguro.
No obstante, los modelos de estos collares pueden variar con respecto al tamaño, diseño o nivel de sustancias que emite. Por lo tanto, con tantas características diferentes, se vuelve un verdadero desafío saber cuál es el más eficiente.
Afortunadamente, para ti, aquí hemos recolectado toda la información que necesitas saber antes de comprar un collar de feromonas para gatos.
Nuestra selección de mejores Collares de Feromonas
¿Cómo funcionan los collares de feromonas para gatos?
Se ven como cualquier otro collar, pero ocultan un secreto: están impregnados con los aromas que emite una gata lactante.
Estos aromas, mejor conocidos como feromonas, le envían un mensaje a tu mascota y le hacen saber que todo está bien, que puede sentirse seguro.
Aunque muchas veces no puedas percibir el olor que emite el collar, eso no significa que tu gato tampoco lo olerá. Recuerda que estos animales tienen un sentido del olfato más agudo que el de los seres humanos, por lo que recibirán el mensaje sin problemas.
Estos collares suelen diferir con el material de fabricación que se emplea, con respecto a los collares estándar. Además, por lo general, solo tienen un tiempo de efectividad de unos 30 días aproximadamente, así que deben cambiarse con mayor regularidad.
¿Cuándo es necesario un collar de feromonas para gatos?
Estos son especialmente recomendados cuando tu mascota está experimentando episodios de ansiedad o de miedo.
Los gatos suelen demostrar estos sentimientos a través de su comportamiento, por ejemplo, se vuelven agresivos, escurridizos, esquivos, temerarios e incluso pueden tener repercusiones en su salud física como vómitos, pérdida del pelaje o pérdida de peso.
La ventaja de tratar estos problemas con un collar es que no estamos sometiendo al gatito a ninguna medicación y aumentaremos su tranquilidad con un método totalmente natural.
Otros signos de que tu gato está teniendo ansiedad son:
- Maúlla más de lo normal.
- No deja que nadie se le acerqué y duerme más de lo que solía hacerlo.
- Está teniendo comportamientos destructivos: rompe y rasga cosas.
- Defeca en lugares donde no lo hacía.
- No come con la misma regularidad o apenas prueba su comida.
- Se rasca demasiado y emite extraños silbidos.
- Está muy agresivo y no usa sus juguetes.
- No sale a explorar fuera de casa.
¿Qué se debe considerar antes de comprar un collar de feromonas para gatos?
Hay que tener muy claro que no todos los collares calmantes que hay en el mercado son realmente tan efectivos como prometen sus fabricantes.
La mejor manera de evitar hacer una mala compra es evaluar detalladamente los siguientes aspectos.
Material de fabricación
Realmente casi no hay posibilidad de elegir el material con el que se fabrica. Esto se debe a que los empresas deben emplear un material que no altere o intervenga en la emisión de las feromonas. Sin embargo, lo que si puedes hacer es escoger uno que tenga la flexibilidad suficiente como para no causar irritación en el cuello del gato debido a la fricción.
La mayoría de estos, se hacen con plástico, sin aditivos que puedan ser tóxicos o perjudiciales para la salud de la mascota.
Eficiencia
Esto depende de las sustancias o feromonas incorporadas en el collar. La mayoría de las marcas recomiendan que se cambie el accesorio 30 días después de su uso, pues después de este periodo es menos probable que siga teniendo los mismos efectos iniciales.
Algunas cuantas marcas (son muy pocas, la verdad) aseguran que su producto puede durar el doble de tiempo, pero considerando que el collar siempre está en funcionamiento (no se puede regular la emisión de feromonas) lo mejor es no confiarse y seguir atendiendo al cambio de cada 30 días.
Tamaño
La longitud determina qué tan cómodo se sentirá el gato llevando el collar. Por suerte, la mayoría de los modelos se encuentran con tamaños universales y son ajustables, así que, en caso de que el gato crezca durante el tiempo que lo usa, puedes ir aflojándolo según sea necesario.
También puede suceder que el accesorio tiene una longitud demasiado grande, pero también hay una solución para esto. Todo es cuestión de cortar el excedente y dejarlo con el tamaño que nos parezca conveniente.
Ingredientes activos
No todos los fabricantes emplean los mismos ingredientes activos para sus productos. Muchos modelos no contienen unicamente feromonas, sino que en ocasiones, estas se combinan con aceites esenciales o con hierbas naturales.
Lo mejor es averiguar a profundidad qué tipo de ingredientes activos posee y determinar si estos no son demasiado potentes para el animal. Incluso, podrías pedir la opinión de un veterinario para estar seguro de esto.
Seguridad
Por último, hay un detalle que nunca deberíamos descartar: la seguridad.
Aunque estos sean accesorios desechables, es importante que tengan una hebilla o broche separable para que garanticen la seguridad del felino. De lo contario, estás arriesgando al gato a que sufra asfixia o estrangulación si queda enganchado de su collar con cualquier objeto.
Es fundamental que cuides el collar del gato. No puedes lavarlo como harías con los collares normales porque el agua, el jabón y la acción de restregarlos causarían que pierda completamente su eficacia. De hecho, para evitar que esto suceda si el gato lo moja accidentalmente, trata de comprar uno que sea impermeable.
Recuerda que no se puede reutilizar el collar si quieres que siga siendo efectivo.